En su novela más reciente, este autor español nos traslada hasta la región del delta del río Paraná, llamado también Tigre, cerca de Buenos Aires. Allí un grupo de amigos en 1975 se compromete a defender la civilización y los derechos humanos en plena dictadura militar. Transcurre el tiempo y treinta años más tarde uno de ellos -Álvaro Montes, residente en Madrid- recibe un llamado de auxilio de parte de uno de sus antiguos compañeros de cofradía. A su regreso a Argentina, Álvaro se reencuentra con sus amigos y descubre en sus propias historias un espejo de lo que ha sido la evolución reciente del país, marcado trágicamente por la violencia, el olvido y la traición de las grandes esperanzas. El autor advierte que la voluntad de olvidar es una amenaza para la identidad de las personas y los pueblos.